SER CRISTIANO/A EN VERANO

v  Es el tiempo de serenar los sentimientos y emociones. Tienes tiempo para todo y también para ti mismo/a y para Dios. Haz lo que el trabajo y la rutina del curso no te deja hacer. SERENA TU SER.

v  Practica el silencio y la contemplación. Disfruta de todos los momentos que nos regala este tiempo, pasea, escucha, siente… MEDITA

v  Haz todo aquello que te gusta y te hace mejor y que no puedes hacer durante el estrés del año. Lee, pinta, juega, baila, etc… Dios te quiere alegre y feliz

v  Es tiempo de compartir tiempo, conversaciones, ilusiones, risas, etc.… con los que más quieres, comenzando por tu familia. COMPARTE AMISTAD Y AMOR

v  Reza y da gracias a Dios por la posibilidad del descanso. La fe no admite vacaciones. Somos sus hijos en otoño, invierno, primavera y también en verano. PARTICIPA EN LA EUCARISTÍA ACTIVIMENTE.

v  Sé sociable y comparte lo que eres y vives con los demás, es tiempo de estar con mucha gente que tiene mucho que dar, pero también que recibir. No te prives de ser tu mismo/a con tus cualidades y COMPARTE

v  Necesitamos del descanso, pero el de verdad. Dedica tiempo al descanso del cuerpo y la mente. Aprende a relajarte y a no hacer nada, es tan necesario como respirar. DESCANSA.

v  Siempre que puedas viaja a ese lugar o lugares que te llenan de vida, alegría y en los que te sientes muy bien. Encuéntrate contigo mismo y revisa tu vida en silencio y con total tranquilidad. HAZ REVISIÓN DE VIDA

v  No tengas prisa, las vacaciones son para no correr y el verano para recargarse. Regresa renovado/a y con muchas ganas de cambiar el mundo que te rodea comenzando por ti mismo/a, es un buen momento para, desde la tranquilidad, hacer proyecto para el curso próximo. PROYECTO PARA EL CURSO